

El procedimiento para la Limonada de té verde es muy rápido y sencillo. En una jarra con el agua muy fría ponemos las tres bolsitas de té verde apto para preparar en frío. Le añadimos la mitad de los arándanos, el vaso de limonada con el azúcar que queramos añadir de más, disuelta (o ponemos sacarina líquida), y en un mortero machacamos el resto de los arándanos hasta que queden molidos. Ponemos encima de una jarra un colador y vertemos el zumo de arándanos. Movemos bien todo el contenido de la jarra, le añadimos hielo, rodajas de limón ¡¡y a refrescarse!!