Receta de roscos de Naranja y Aceite de Oliva Virgen Extra
Si sois seguidores de este blog desde hace tiempo, conoceréis la receta de Roscos de vino y aceite de oliva virgen extra de mi suegra Marcela, os recomiendo que los hagáis porque están de vicio. Esta receta de roscos de naranja y aceite de oliva virgen extra es una variante de la que os he mencionado, cambiamos el vino por zumo de naranja, y no van espolvoreados con azúcar glass, sino que llevan un pincelado de huevo y azúcar.
Si estás buscando una receta sencilla para hacer esta Navidad, os animo a prepararlos, duran un montón en la despensa a pesar de no ir envueltos, y son un regalo ideal para nuestras visitas Navideñas.
Disculpad que las medidas son en vasos, es una receta tradicional que pasa de generación en generación, y esta era la forma en la que se medía la cantidad de ingredientes de la receta. Si queréis ver como es el paso a paso más o menos, miradlo en la receta de roscos de vino que es muy similar: AQUÍ
Esta receta, puede servir para Navidad, para Semana Santa, ¡y para todo el año! mi suegra los tiene siempre en la despensa para disfrutar del café, así que ¡vamos a ponernos con las manos en la masa!
Receta de roscos de Naranja y Aceite de Oliva Virgen Extra
Ingredientes
- 1 vaso de zumo de naranja
- 1 vaso de anís dulce
- 1 vaso de azúcar
- 3 vasos de aceite de oliva virgen extra
- 3 gaseosas de "EL TIGRE"
- 800 g. de harina
Elaboración paso a paso
- En un bol grande vertemos el zumo de naranja, el azúcar y el anís dulce.
- En una sartén “templamos” el aceite (este paso es el más importante, el aceite tiene que estar templado), y en el mismo bol dónde tenemos el zumo de naranja, el azúcar y el anís, añadimos la harina tamizada y vamos vertiendo el aceite templado poco a poco hasta conseguir una masa que no se pegue en las manos.
- Si hace falta se le agrega más harina hasta conseguir una masa que no se quede pegada en las manos.
- Cogemos pequeñas bolitas de masa, hacemos una albóndiga, la aplastamos y le hacemos un agujerito en el centro.
- Vamos colocando en una placa para el horno.
- Pincelamos con huevo y espolvoreamos con azúcar.
- Horneamos a 180 grados durante 15-30 minutos vigilando que queden dorados.
- ¡¡Y a disfrutar de ellos!
Notas
Mi suegra añade la harina "a ojo", pero la última vez la pesamos y son 800g exactos.