La «bellisima» Lidia del blog «Atrapada en mi cocina» celebra su tercer aniversario como bloggera, para ello ha convocado un concurso para que le mandemos nuestra mejor tarta. Ya he visto algunas de las tartas que se han presentado y son maravillosas, todo un lujo, incluso ya tengo mis favoritas jejeje. Viendo el nivelazo que hay no pensaba participar, pues como bien sabéis, nos pierden los dulces pero los evitamos a toda costa. Es por ello que ya que es el concurso sobre nuestra mejor tarta, y que lo organiza mi querida Lidia, con todo el amor del mundo me presento con esta deliciosa Cheesecake de chocolate blanco que queda cremosa en su interior y crujiente en la base y en la superficie.
Ingredientes para la Cheesecake 100% de chocolate blanco ;
400 g de galletas integrales de chocolate, 75 g de mantequilla, 800 g de queso crema, 2 cucharadas colmadas de azúcar glass, 400 g de chocolate blanco para fundir (yo lo compro en Lidl), Virutas de chocolate blanco para decorar.
Lo primero que hacemos es machacar las galletas hasta reducirlas a migas (yo he usado la thermomix) y las ponemos en un bol junto con la mantequilla derretida pero no caliente. Mezclamos bien con la cara convexa de la cuchara.
Sobre un molde desmontable de unos 20 centímetros de diámetro volcamos la mezcla y la repartimos bien. Prensamos para que quede bien liso. Reservamos.
Ahora en un bol grande en el que podamos batir con varillas o en el vaso de la thermomix, mezclamos todo el queso crema con las dos cucharadas de azúcar glass.
Fundimos ligeramente el chocolate blanco con cuidado de que no tome mucha temperatura para evitar que se queme, hay que tener mucho cuidado, pues el chocolate blanco es especialmente propenso a quemarse muy rápido. Separamos una cuarta parte para la cobertura y dejamos enfriar todo.
Cuando el chocolate haya perdido temperatura incorporamos, cucharada a cucharada la mezcla de queso. Removemos para que se integre bien. Una vez esté todo el queso añadido al chocolate volcamos la preparación sobre la base de la tarta. Alisamos para que la superficie quede homogénea. Guardamos la tarta en la nevera durante 2 horas.
Transcurrido el tiempo, derretimos el chocolate reservado y lo volcamos sobre la tarta. Para cubrirla bien movemos el molde hasta conseguir que toda la superficie quede cubierta. Le ponemos las virutas de chocolate blanco o la decoración escogida.
La tarta quedará cremosa por dentro y crujiente por la superficie, por lo que recomiendo usar un cuchillo «de sierra» para cortarla fácilmente y sin romperla. Ya sabéis si tenéis en casa chocolate-blanco adictos esta es vuestra receta!
hola! me gustaría saber de que tamaño es el molde q utilizaste??
gracias!!!
De unos 24 cm 🙂 ¡Gracias por la apreciación!